NUEVA YORK._ tres dominicanos, junto a un negro y otro sujeto prófugo, violaron repetidamente a una estudiante de la Universidad Hofsrat en Long Island y de 18 años de edad. La sodomía, para la que los cinco criminales se turnaron, se cometió en un baño para hombres, donde la mujer fue llevada por la fuerza, dijo la policía del condado Nassau. La violación sexual en serie fue perpetrada después que uno de los acusados le arrebató el celular a la víctima, mientras bailaban en una fiesta organizada en el club universitario situado en el recinto académico. Los dominicanos fueron identificados como Jesús L. Ortiz, Kevin R. Tavares y Stalin Felipe de 19, 20 y 21 años de edad respectivamente, mientras el afro americano es Rondell Bedward de 21.
El teniente John Allen, quien describió el brutal ataque sexual como una “despreciable depredación” dijo que la joven bailaba con Ortiz. El episodio comenzó a las 3:00 de la madrugada del domingo último. Luego de quitarle el teléfono, la muchacha siguió al hombre y los otros, se desplegaron alrededor de ella. Entre todos, la obligaron a entrar a uno de los baños para hombres, donde se turnaron para violarla repetidas veces.
Están acusados de cinco violaciones consecutivas y enfrentan, de ser hallados culpables, hasta 25 años en la cárcel. El padre de Tavares, defendió a su hijo diciendo que éste jamás cometería ese tipo de acto y aseguró que es inocente. Felipe reside en El Bronx y fue invitado a la fiesta por uno de sus amigos estudiante de la misma universidad, quien gestionó con uno de los guardias de seguridad del campus que lo dejara entrar al baile.
Antes de violar a la joven, la ataron con sogas y cintas adhesivas. La víctima gritó varias veces por ayuda, pero aparentemente, nadie la escuchó, añadió el teniente. El estudiante Ryan Broderick que vive en el mismo piso donde el asalto sexual fue cometido, confirmó que nadie, oyó ningún grito.
El otro participante y que está prófugo no fue identificado por la policía. Ortiz fue arrestado cuando salía de su casa en medio de una alarma de fuego no relacionada con el caso de la estudiante violada. Los demás fueron arrestados también en sus respectivas casas el domingo. Una fianza de $350 mil dólares en efectivo y $500, 000 en bonos, les fue impuesta a los inculpados.
“Mi hijo no es culpable y es el mejor niño del mundo”, insistió el papá de Tavares que no quiso dar su nombre a los medios.
El teniente John Allen, quien describió el brutal ataque sexual como una “despreciable depredación” dijo que la joven bailaba con Ortiz. El episodio comenzó a las 3:00 de la madrugada del domingo último. Luego de quitarle el teléfono, la muchacha siguió al hombre y los otros, se desplegaron alrededor de ella. Entre todos, la obligaron a entrar a uno de los baños para hombres, donde se turnaron para violarla repetidas veces.
Están acusados de cinco violaciones consecutivas y enfrentan, de ser hallados culpables, hasta 25 años en la cárcel. El padre de Tavares, defendió a su hijo diciendo que éste jamás cometería ese tipo de acto y aseguró que es inocente. Felipe reside en El Bronx y fue invitado a la fiesta por uno de sus amigos estudiante de la misma universidad, quien gestionó con uno de los guardias de seguridad del campus que lo dejara entrar al baile.
Antes de violar a la joven, la ataron con sogas y cintas adhesivas. La víctima gritó varias veces por ayuda, pero aparentemente, nadie la escuchó, añadió el teniente. El estudiante Ryan Broderick que vive en el mismo piso donde el asalto sexual fue cometido, confirmó que nadie, oyó ningún grito.
El otro participante y que está prófugo no fue identificado por la policía. Ortiz fue arrestado cuando salía de su casa en medio de una alarma de fuego no relacionada con el caso de la estudiante violada. Los demás fueron arrestados también en sus respectivas casas el domingo. Una fianza de $350 mil dólares en efectivo y $500, 000 en bonos, les fue impuesta a los inculpados.
“Mi hijo no es culpable y es el mejor niño del mundo”, insistió el papá de Tavares que no quiso dar su nombre a los medios.
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